Inglaterra, 1800. Shylla Landless debe escapar de Mulberry Hall para poner a salvo a su pequeña hija Christin. Años después, Christin se ha convertido en una bella joven, libre y decidida. Cuando un aristócrata intenta comprar sus favores, se burla de él sedándolo, robándole y dejándole desnudo en el bosque. Perseguida por ladrona, acabará en manos de unos esclavistas y en el harén del bey de Baristán. Christin ni se imagina que allí volverá a enfrentarse al noble al que había humillado, quien había jurado cobrarse la ofensa de la gitana, de la que quedó prendado.