Ver a un ser humano que cumpla su sueño es algo maravilloso. Como ir a la luna o descubrir América: este es el motivo por el que estamos aquí». son palabras de Tamara lunger, la joven y fuerte alpinista italiana que en febrero de 2016 intentó la cumbre del Nanga Parbat junto a Simone Moro en invierno. Moro alcanzar la cumbre junto a Alex txikon y ali sadpara. Ella renunció cuando estaba a solo setenta metros de la cima de la montaña. Se sentía mal, y escucha su «voz interior» que le instaba a descender, consciente de que, si por afán de gloria hubiera continuado subiendo, después habría necesitado ayuda para descender, poniendo quizás en peligro a sus compañeros de cordada. ¿Pero quién es esta mujer y qué es lo que empuja a Tamara a esos desafíos extremos? En este libro, la alpinista relata su aventura en el Nanga Parbat, pero también profunda en el mundo que la rodea y en el interior de sí misma. Se des ve la así una personalidad explosiva, la de una persona que, habiendo crecido en estrecho contacto con la naturaleza, y acostumbrada desde pequeña a poner se a prueba en el mundo de los deportes, cultiva la pasión del alpinismo como una forma de encontrarse a sí misma. Sin duda, ser una mujer en un ambiente hasta ahora casi exclusivamente masculino tiene un precio: en el campo base tienes que hacer te valer, tienes que demostrar que eres capaz de esforzarte y rendir «como un hombre» e incluso a veces mantener a raya a tipos «que parecen marineros que acabar an de bajar de un barco»? pero Tamara, tal vez quizás gracias a una pizza de locura ante el peligro, vive el alpinismo como una oportunidad para poder mejorar constantemente, y sentir se en armonía con el cosmos. Para ella, el desafío en la montaña tiene de hecho algo de espiritualidad, le ayuda a sentir se más próxima a Dios. Y le regala felicidad. Leer estas páginas, que son a veces aventureras y a veces reflexivas, es como recibir una inyección de energía pura.