Si en su primer libro Gabriel nos explicaba cómo podemos conocer lo real y exactamente qué podemos considerar por real, en este segundo trabajo el filósofo alemán -máximo representante de la escuela filosófica del Nuevo Realismo- utiliza a Platón, Schopenhauer y Kant, pero también a "The Walking Dead", "Dr. Who" y "Fargo", para luchar contra el neurocentrismo, la limitación de la consciencia y la reflexión humana a las meras capacidades neuronales. En cierta manera Markus Gabriel libera al sujeto del determinismo cientificista, a favor de una ética de la responsabilidad en la reflexión. El yo no es sólo su cerebro, va mucho más allá.