Olivier, conde de Sancerre, vuelve a reencontrarse con Louise, condesa de Nangis y su prima. Esta vive una vida opulenta, pero falta del amor de su esposo. La muerte de este despeja la relación entre los primos que va progresando hacia un amor efusivo pero no declarado, con la hermana de Louise como único testigo y confidente. Sin embargo, un secreto no desvelado atenaza la voluntad de Olivier y conduce la relación hacia la tragedia y la locura.