La acción transcurre en el viejo San Juan de Puerto Rico e incluso alcanza a una España enfrentada a sus viejos demonios familiares. Desde allí el pasado se anuda con el presente gracias a una investigación que, a pesar de malévolos obstáculos, trampas, mentiras interesadas y violencias, nuestro protagonista realiza hasta un final que sobrecoge al lector por inesperado. El convento encierra un misterio sepultado desde hace décadas, hasta donde se pierde la memoria, con secretos encerrados en una arquitectura diseñada para el olvido y custodiados por el dudoso y atrabiliario clérigo Juan Alejo de Arismendi.