La sombra de una mano con un rotulador puede simular una pistola empuñada y llegar a costar la vida de Eugenio, profesor en paro y detective por afición. La muerte ajena o propia asoma además donde menos se espera y de la manera más extraña. Soledad, especie de novia de Eugenio, su vecindario y sus amigos amueblan la vida de un hombre bienintencionado a quien las circunstancias aprietan hasta quizá el final.