"El buen soldado Svejk me enseñó a mirarlo todo desde la perspectiva de los marginados, de los de abajo. Y desde el punto de vista de la docta ignorancia, o sea, apagando el brillo del intelecto e intentando ser igual al polvo en que me voy a convertir. El buen soldado Svejk me enseñó a preferir la vivencia al saber puro." Bohumil Hrabal