Publicada en 1945, en plena Segunda Guerra Mundial, George Orwell se sirvió de esta fábula satírica para criticar con dureza los abusos del régimen soviético de Stalin. Los animales de la granja, dirigidos por el carismático Napoleón, quieren acabar con la tiranía del señor Jones, el dueño, e instaurar un sistema más justo e igualitario. Pero pronto sus gobernantes los traicionarán.