La ciencia dice que soñar nos sirve para consolidar el aprendizaje, gestionar nuestras emociones y descansar el cerebro, pero por estar en ese terreno fronterizo entre la realidad y la fantasía, no podemos evitar preguntarnos si los sueños son otras muchas cosas: ¡una vía de escape, premoniciones. Deseos ocultos, incluso avisos del Más Allá?. Sin duda, lo que siempre serán es una manera de conocernos mejor a nosotros mismos.