La mayor parte del sufrimiento y de los trastornos psicológicos de los seres humanos son reacciones exageradas e innecesarias que pueden reducirse significativamente. Este es el sencillo mensaje que transmite este libro. La irritación, la ansiedad y la depresión no sólo son totalmente prescindibles, sino que además, cuando alguien padece cualquier tipo de trastorno emocional, está siendo injusto y cruel consigo mismo. El doctor Albert Ellis fue uno de los primeros psicólogos que explicó que somos nosotros mismos quienes creamos nuestros sentimientos y a menudo nos castigamos con pensamientos y emociones negativas. El autor considera la aplicación de la terapia racional emotiva conductual una de las mejores soluciones a estas trampas que nos autogeneramos. Dados el estrés y la tensión de la vida cotidiana, lo último que necesitamos son esos problemas agobiantes que nos provocan nuestra manera de pensar y sentir respecto al mundo y la gente que nos rodea.