¿Por qué ser generosos Porque, como se nos dice en la Biblia, «hay más dicha en dar que en recibir». Sin perder nunca de vista esta afirmación, el autor, que conoce de primera mano el enorme potencial de la generosidad gracias a su extensa experiencia de ayuda a comunidades necesitadas, reflexiona sobre esta necesaria virtud, sus características y sus diversas manifestaciones. Después de identificar los motivos por los que nos cuesta ser generosos, nos propone un itinerario –dar lo material, nuestro tiempo, nuestra atención y escucha, nuestra empatía, nuestro perdón…– y plantea cómo ha de ser la generosidad en el amor, en los conflictos, en medio de un mundo egoísta y consumista, con quienes aún no están aquí, con los enfermos, ancianos y moribundos. Por último establece, desde la parábola de las diez doncellas, los límites de la generosidad.