¿Qué pasaría si un día te levantaras de la cama y tu vida comenzara de nuevo sin esa persona a la que siempre amaste y siempre estuvo a tu lado? A lo largo de nuestro existir, justo en plena pubertad, comenzamos a experimentar el amor, el desamor, y mil y un sentimientos más de los que la vida nos dota para ir adquiriendo un aprendizaje de manera autodidacta a base del caer y del levantar, o nos los coloca como obstáculos intangibles, en el camino a recorrer, simplemente para probarnos, abasteciéndonos de experiencias y dándonos, así, la estimulación suficiente para lograr con éxito la autosuperación emocional de ese órgano en el cual residen los afectos, llamado vulgarmente corazón. Y si te pusieses en mi lugar, ¿cómo crees que lo afrontarías? ¿Elegirías vivir, o estancarte y seguir residiendo en el pasado?