Mi ilustre maestro y amigo, escribe Emilia Pardo Bazán a Benito Pérez Galdós en 1883. Querido y respetado maestro, un año más tarde. Amigo querido, en 1886, firmando soy de usted amiga, admiradora y compañera treinta y tantas cartas después. Miquiño mío del alma le dice en mayo de 1889, avisándole de que el sábado siguiente podrá besar mi escultural geta gallega, si se encuentran por casualidad. Un año más tarde, ya Galdós ha pasado a ser su caro roedor literario y, bien entrado el siglo siguiente, firma aún las misivassu invariable amiga Emilia. Más de 90 cartas escritas en 32 años cuentan la amistad, el amor y la admiración entre dos genios de su tiempo, que compartieron cuitas creativas, avatares editoriales y alguna escapada ocasional. Unas cartas en las que la personalidad de Pardo Bazán apasionada, clara, guerrera, maternal brilla tanto como su dominio del lenguaje, su gracia y su originalidad. Todo un festín para amantes de la literatura, espíritus románticos y cotillas literarios de ayer y de hoy. Con prólogo, cronología y notas. Incluye reproducciones de cartas y fotografías