Hay empresarios que más allá de crear con su empresa riqueza económica buscan una fortuna más loable e intangible: ayudar a la sociedad. Son conocidos como emprendedores sociales y se les reconoce por su doble alma: económica y humana, negociante y sensible, comercial y transformadora, emprendedora y social. Con el fin de descubrir a 26 de estos idealistas pragmáticos y de la filosofía que todos ellos comparten, el autor, hace un intimista recorrido por casos inspiradores y deja claro que si algo saben es que resolver problemas sociales puede ser un buen negocio.