Continuación de la conocida serie Peepshow (Peepshow, Pobre cabrón, Buen tiempo) Consumido se ambienta en los últimos años de la estancia del autor en Canadá junto a sus colegas Seth y Chester Brown. El título puede ser entendido literalmente no solo como resultado de la pasión masturbatoria de Joe Matt, sino como la crónica de la decadencia de un artista que ha tardado casi una década en completar las exiguas cien páginas de este libro. Hay aún una tercera lectura del título que nos remite a su proverbial tacañería, uno más de los plumeros que adornan a este lamentable pícaro moderno, vago antológico, sablista, llorica y campeón de los pajeros, que sin embargo alcanza aquí cotas de una rara elegancia como narrador.