Natacha nos emociona en los detalles, en esa literatura que respira como con ronquidos, como cuando un tanque se aproxima por una ladera antes de la batalla. Sabemos que los tanques son monstruos gigantes que van dejando huellas y que te pueden devorar. Así es este libro que tenéis entre las manos: arma en la vanguardia que no se parece a nada ni a nadie. Y si se parece a alguien, sólo se parece a Natacha, que es un género literario en sí misma. Hace años que la sigo a diario por las redes: fue un flechazo que aún perdura. Me temo que las heridas de sus balas me han dejado marcado para siempre. Pero no me importa: yo he leído toda mi vida para que me disparen y me asesinen, leo para morir y resucitar tras cada página. ¿Se le puede pedir algo mejor a un libro? Lleven cuidado, pues con este el peligro está asegurado y quedarán atrapados en un misterio: Natacha es una bruja de las intuitivas y versátiles, aunque también es de las poderosas y hechiceras (¿recuerdan a esas rubias del cine negro?). Muerdan la manzana de esta bruja y verán.Quedan avisados. 10