La historia de la extraordinaria Vivian Maier, la fotógrafa de calle más importante del siglo XX, que murió en el anonimato después de toda una vida trabajando como niñera cuyo talento fue descubierto al mundo solo después de su muerte, cuando en una subasta de sus posesiones uno de los compradores dio con una caja de películas sin positivar que ofreció una inesperada sorpresa al mundo. Maier fue una mujer extraordinaria: excéntrica, viva y comprometida, pasó toda su vida trabajando entre Nueva York y Chicago. Cuidaba niños e iba cargada a todas partes con su Roleiflex de formato medio. Sus fotografías siempre tuvieron la vocación de permitir hablar a los perdedores del sueño americano.