A las palabras de Calderón «la vida es sueño» se contrapone la afirmación’el sueño es vida», y de ahí surge el germen de estos poemas. Escritos como mensajes de amor a un amado desconocido y pero fruto de la mente de quien escribe, no solo le hacen cobrar vida sino que, como un astro, lo envuelven en la rotación del mundo que él mismo genera, a la vez personal y universal. Al ser objeto de deseo un ser irreal, igualmente se torna irreal quien le ha dado vida. Tan fuerte es este nexo que no hay posibilidad de separación. Clara Janés (Barcelona, 1940) es licenciada en Filosofía y Letras, Maitre és lettres, por la universidad de la Sorbona, y desde 2015, miembro de la Real Academia Española. Cultiva la poesía, la novela y el ensayo y se distingue como traductora, particularmente de la lengua checa. Ha vertido también al español, entre otros, a autores franceses, ingleses, alemanes, turcos y persas. En 1992 se le concede el Premio Tutav, de Turquía;en 1997 el Nacional de Traducción;en 2000 la Medalla del Mérito de la República checa;en 2004 la de Bellas Artes de España;en 2007 el Premio Teresa de Ávila;en 2011 el Francisco Pino de Poesía experimental. Su creación poética consta de más de cuarenta libros entre los que destacan Vivir, Kampa, Rosas de fuego, La indetenible quietud (en colaboración con Eduardo Chillida), El libro de los pájaros, Los secretos del bosque, Fractales, Río hacia la nada, Orbes del sueño, La noche de la pantera y Kráter. En prosa destacan sus novelas Los caballos del sueño y El hombre de Adén, y los libros María Zambrano. Desde la sombra llameante, La voz de Ofelia, Kamasutra para dormir a un espectro y La vida callada de Federico Mompou.