Titular da família Crasto, o conde D. Roiz vê-se só e arruinado. Com a República, a nobreza deixou de ser o que era. O solar que herdou pede obras com urgência, ou passará a ruínas.
¿Permite el uso de cookies de nuestro sitio web en este navegador?
Utilizamos cookies para ofrecer una mejor experiencia en este sitio web. Puede obtener más información sobre nuestras cookies y cómo las utilizamos en nuestro Política de Cookies.