Desde el Oriente, el Venerable Maestro es el encargado de dirigir la logia y orientarla hacia la Luz. La veneratura se aprende ejerciendo la función, tenida tras tenida, con el convencimiento de que este privilegio otorgado por los hermanos y hermanas de su taller se verá altamente recompensado cuando con el deber cumplido cederá el mallete a su sucesor. Su tarea es uno de los tesoros mas valiosos de la Francmasonería iniciática, heredada de la tradición de los antiguos Maestros de Obra, que edificaron en el pasado los templos donde se vivieron los ritos de transformación en Luz. Pero debe tenerse presente que en una orquesta, el director de la misma conoce a la perfección su libreto y a él le toca dirigir la partitura, pero jamás debe olvidar que si no tiene buenos músicos, la obra no sonará bien. Este libro ha sido concebido como una herramienta práctica de consulta y aporte de experiencias vividas e ideas dispersas adquiridas desde la específica, delicada y absorbente tarea de administrar un taller masónico, con la idea concreta de no tratar de ser un manual o vademécum, sino una sincera aportación con el propósito de demostrar que la obra siempre está inacabada y el último capítulo esta aún por escribir.