El juicio al Procés ha modulado la política española y catalana desde 2015. Dificultó una moción de censura, impidió aprobar unos presupuestos, precipitó unas elecciones anticipadas y favoreció la alianza de la ultraderecha y las derechas nacionalistas Para entenderlo en toda su dimensión, Guillem Martínez se ha vestido de técnico de rayos X y nos muestra las entretelas del juicio que nunca debió ser. Por aquí desfilan abogados audaces, gobernantes desmemoriados y guardiaciviles envueltos en banderas. Un país entregado al derecho penal para solucionar un conflicto social en el que chocan dos mentiras, pocos políticos y millones de ciudadanos.