Hay veces que algo inesperado rompe con tus planes de futuro. Incluso con los de presente. A mí me pasó. Y me tocó reconfigurarme por completo. Para todo: para conducir, para trabajar, para relacionarme con mi familia, para seguir viendo a mis amigos, para reubicarme en mi casa y, en general, en mi vida ¿Qué hacer cuando el destino te mete un revés así Yo solo tengo una receta. La mía propia. A mí me funciona porque no quiero dejar nunca de beberme la vida a tragos.