Todas las miradas están pendientes de Perdido Beach. De la noche a la mañana, la cúpula se ha vuelto transparente como el cristal. El mundo puede ver el interior. Los habitantes de la ERA pueden ver el exterior. Eso es todo de momento, pero los habitantes de la ERA intuyen que se acerca el final: la cúpula desaparecerá en cualquier momento. Seguir vivo en la ERA nunca ha sido fácil, pero ahora que los niños de Perdido Beach rozan la esperanza con la punta de los dedos, la presión es más fuerte que nunca. ¿Conseguirán conservar la vida -y la cordura- en un mundo donde la desesperación es la norma? Mientras la Oscuridad amenaza con devorarlos, los habitantes de la ERA solo pueden contar las horas que les quedan para la liberación.