Este libro arroja luz sobre un tema controvertido que ha venido despertando un creciente interés entre los estudiosos de Heidegger en los últimos años: la afinidad entre la filosofía heideggeriana y el pensamiento asiático, en particular respecto a la cuestión de la "Nada". El libro presenta una enorme cantidad de material y testimonios que documentan el interés del pensador alemán por el taoísmo y el budismo zen, y ponen de manifiesto las evidentes conexiones entre las dos partes implicadas en este fecundo diálogo. Se incluye además una conversación sobre el arte que Heidegger mantuvo con el filósofo japonés H. S. Hisamatsu y el relato testimonial de Paul Shih-yi Hsiao.