Un viaje por el saber colectivo que se ha propuesto vivir una vida buena dentro de los límites biofísicos y más allá del saqueo. Pero se puede imaginar algo así en el horizonte de la extinción? En realidad, responde Bifo, no hay otra forma de salir de esta que «seguir imaginando ternura, imaginando erotismo, imaginando aventura». Disponemos de lo necesario para ello. Las mil y una maneras de poner la vida en el centro han sido soñadas, debatidas, practicadas, pulidas. Algunas solo tenemos que recuperarlas, otras se limitan a dejar de hacer algo;no pocas están ya en marcha y otras siguen pareciendo política-ficción, bloqueadas por poderosos intereses. Pero allí están, sobre la mesa de esta década crucial. Y aunque cambiar de rumbo va a ser cualquier cosa menos fácil;todo es posible cuando seguir igual ya no lo es.