El Mediterráneo puede concebirse como una antigua encrucijada de encuentros entre pueblos y culturas, como un depósito de historias, un lugar de descubrimientos, violencia y maravillas, donde las mujeres no están excluidas, sino presentes y con voz propia. Ya sean diosas o reinas, esclavas o prostitutas, la tradición nos ha dejado imágenes de heroínas que viajan por el mar y viven historias intensas, a menudo amorosas, mujeres deseadas por dioses y hombres, víctimas de secuestros y abusos. Nadando o montadas a lomos de animales, huyen por las aguas, perseguidas, violadas, pero también a veces protegidas y defendidas. Tienen un destino azaroso, como el de Io o Europa, progenitoras de ilustres descendientes. O se ven obligas a subir a una embarcación (un barco, una lancha, un cofre) y se enfrentan a un destino cargado de riesgos e incógnitas. Un viaje al mito, a la religión, a las creencias, pero también a la realidad cotidiana, entre lugares que nos son conocidos o que aún hoy siguen siendo misteriosos.ue es recolza en una posada en escena composta per petits tocs sensibles i delicats que evoquen la dolÇa nos