El agua y el suelo son dos recursos naturales estratégicos e imprescindibles para la vida que contribuyen a la nutrición humana y animal y a la seguridad alimentaria a partir de alimentos de calidadprocedentes de la actividad agr¡cola. Por tanto, su uso racional y un correcto manejo de ambos es indispensable para conseguir la ansiada Agricultura Sostenible, capaz de contribuir al progreso socioeconómico y garantizar el desarrollo de las generaciones venideras.