¿Qué tiene en común un investigador de la policía, experimentado, arrogante, irrespetuoso y déspota, con un veterinario recién graduado, temeroso, tímido y prudente? Casi nada. Sin embargo, el afán del sargento Marcel·lí Martí por resolver un asesinato y el anhelo de Gilbert por escapar de los fantasmas de su infancia empujan las líneas paralelas de sus vidas para que se toquen en los rincones menos esperados de Manresa. Recuerdos, deseos, pasiones prohibidas, fiestas, tradiciones olvidadas? En fin: personas. Mezclados con sencillez en Añoranza, la novela que Violeida Sánchez, cubana de nacimiento y manresana por adopción, te invita a disfrutar.