Esta es una historia real. En la noche del 27 de junio de 1605, en Valladolid, junto a una casa a orillas del río Esgueva, donde vive Cervantes con cinco mujeres apodadas Las Cervantas (su esposa, dos de sus hermanas, su sobrina y su hija), un caballero es herido de muerte. El herido muere sin haber querido aclarar los hechos. El alcalde interroga a la familia Cervantes y a otros vecinos para encubrir al asesino enlodando el sumario;enviará a la cárcel al escritor, a una de sus hermanas, su sobrina y su hija, que regresarán a casa bajo un arresto domiciliario que durará seis días. Desde esa historia real, tratamos de acercarnos a las mujeres que vivieron con el autor de El Quijote e influyeron en su literatura, sus miedos, sus fortalezas y sus modos de enfrentarse a la vida en una época donde una mujer libre, que sabía leer, resultaba, cuando menos, sospechosa.