Las vacaciones de verano de Sofía en la playa van a cambiar su existencia y la de Miguel. En sus manos está el destino no solo de sus vidas sino también del futuro de un lugar muy especial que puede desaparecer si cae en manos de los especuladores. Los dos chicos se proponen, junto a su panda de amigos, evitar que sus sueños queden enterrados bajo el cemento y un montón de ladrillos.