Durante la tarde previa a la noche de Reyes, Ana y Mateo se quedan al cuidado de su abuelo. Este les cuenta cómo ese mismo día, cuando tenía la edad de Mateo, trató de averiguar si los Reyes Magos realmente existían. No hay nada como la experiencia del abuelo para salir de dudas, pero? ¿Será cierto todo lo que cuenta, por muy fabuloso que resulte?