El paso del siglo XVI al XVII, estuvo marcado en la ciudad de Granada por una serie de acontecimientos como la revuelta morisca de la Alpujarra (1568-1571) o los descubrimientos de las reliquias de la Torre Turpiana y del Sacromonte. En este escenario, la figura de Ambrosio de Vico se vuelve indispensable para entender el proceso de conformación de la Granada tridentina, desde su posición como maestro mayor de la Catedral de Granada o visitador y veedor de la Diócesis, posición desde la que participaría en los proyectos más importantes como la continuación de las obras de la catedral de Granada, la revisión del proyecto real de Santa María de la Alhambra, la construcción del Sacromonte o la reedificación de un parte importante de iglesias del valle de Lecrín y la alpujarra que se vieron afectadas por las revueltas moriscas.