La crónica de lo que pasó o pudo haber ocurrido en Ojos Negros, municipio arraigado en la Comarca del Jiloca a más de 1.100 metros de altitud, sirve de base para crear una novela coral llena de sentimientos donde todo el pueblo es el protagonista, tanto las personas como su paisaje y su historia. Una narración fechada en verano de 1969, con el halcón como ser omnipresente, símbolo del Hacedor. Un homenaje a las generaciones que hacen e hicieron posible que Ojos Negros siga lleno de vida.