En Latidos Guadalupe nos describe sus sentimientos mezclados con gran dosis de fantasía ante múltiples aspectos de la vida, no solo referentes al corazón, sino también a objetos que igualmente laten al ritmo de sus dedos.Con una prosa poética muy cercana, sin circunloquios ni barroquismo plasma del amor al desamor, de lo visible a lo invisible, de lo tangible a lo intangible con gran realismo pero sin olvidar la magia.