La introspección nos ayuda a clarificar lo que parece oscuro. Nos ilumina y contribuye a nuestra sensación de estar vivos. Acciones más que cotidianas, como montar en bici, ir al cine, leer o visitar un museo adquieren en este libro un sentido y una dimensión especial, simplemente reflexionando sobre ellas, mostrando sus múltiples matices. Además, seremos conscientes de que amar, soñar e incluso respirar es mucho más que una acción mecánica. David Dorenbaum no solo nos orienta en el goce de la sencillez, sino también sobre cómo convivir con la complejidad, bien sea la inmigración, nuestros miedos y fobias, las adicciones o el mismo malestar de las sociedades contemporáneas. Una obra que recoge la increíble capacidad de la mente para dar forma a esa variedad inconmensurable de mariposas que son nuestros pensamientos, nuestras acciones más cotidianas, y de sorprendernos con sus transformaciones, como ocurre en los sueños, pero no solo en ellos.