En la personalidad política de Pedro Sánchez, concurren signos y rasgos que denotan un síndrome narcisista, que determina y contamina su peculiar modo de gobernanza. En su justa medida el narcisismo mejora la autoestima personal, pero en su desmesura puede convertirse en tóxica. El autor de este ensayo, considera que la personalidad del presidente Sánchez es indisociable del socialpopulismo que actualmente define al escenario político español, caracterizado por la polarización política inducida desde el gobierno. En el socialpopulismo, la decisión del líder es la fuente de toda legitimidad y no se halla sometida ni a la ley ni al interés general. El artificio político creado por Pedro Sánchez y su entorno, constituye un artefacto políticamente eficaz pero democráticamente letal. El presente ensayo trata de comprender las razones y las causas de la involución democrática del peculiar gobierno de España. Utilizar el «escudo social» para enmascarar políticas clientelares y populistas, es lo que constituye el núclo del socialpopulismo, cuyo principal objetivo es el de la perpetuación en el poder. Evitar la alte