Los seres mitológicos, las desviaciones de la ortodoxia clásica que propicio el Manierismo, el mundo del Surrealismo, las miradas oníricas y fantásticas de los universos del arte o de la literatura o, incluso, del cine, están preñados de anomalías. No hay leyenda, cuento o mito que no transite por los territorios de lo anómalo. Unas veces para llenar nuestra vida de preguntas;otras, para animarnos a encontrar lo bello en la ejecución de una obra que dé cuenta de esas realidades proscritas. Lo extraño, lo irregular, lo que rompe la pauta de lo «habitual» nos inquieta, pero, con frecuencia, es la anomalía la que nos ayuda a ser permeables a la comprensión de la belleza. Entre esta y lo anómalo se crean impredecibles vínculos. De todo ello se habla en este libro.