Hoy, veintidós años después del retiro de las tropas, los dos hombres, o lo que queda de ellos, ocupan camas adyacentes de un remoto hospital de veteranos. Cuentan con un buen alijo oculto de cervezas y marihuana y, a lo largo de toda una jornada, se lanzan a rememorar sus dolorosas experiencias. En el proceso cada uno se verá irrevocablemente tocado y transformado por la vida del otro. Con asombrosa clarividencia, humor y coraje, Larry Brown escribe sobre el triunfo de la compasión y la ternura en medio del horror y los despojos de la guerra.