La capacidad de Gabriel para utilizar ejemplos de la cultura popular (Breaking Bad, Cómo conocí a vuestra madre o Seinfeld) para explicar la historia de la filosofía y plantear su propia teoría del conocimiento, el nuevo realismo, no tiene igual. Es un pensador original y provocador con una gran capacidad comunicativa, una inteligencia envidiable y un discurso fresco y atractivo. En este libro se pretende desmontar la idea de existencia que todos albergamos, para proponer una visión más analítica y realista del mundo que nos rodea, a través de una idea germinal: el mundo no existe. No hay que buscar el sentido de la vida en algo más profundo o distinto que lo que vivimos, porque en el análisis de la propia existencia y del propio pensamiento humano está el sentido último de la vida.