La erupción del volcán Vesubio quizá en octubre del año 79 de nuestra era enterró bajo varios metros de piroclastos y cenizas las ciudades de Pompeya, Herculano y Estabias, situadas en la Campania. Fue precisamente el redescubrimiento de Herculano en 1738 por parte del del ingeniero aragonés Roque Joaquín de Alcubierre, a partir de algunas evidencias previas, lo que inició las excavaciones en la vecina Pompeya, y que contaron con el entusiasmado apoyo y la financiación del rey Carlos VII de Nápoles (futuro Carlos III de España). Cubierta por cenizas y lapilli, los trabajos resultaron más fáciles en Pompeya y desde 1748 se desenterró, poco a poco, los restos de la ciudad romana que ha impactado a millones de personas que la visitan cada año. Este yacimiento arqueológico ha fascinado a eruditos, anticuarios, investigadores y turistas, y han sido innumerables las obras literarias que han alimentado la curiosidad de un público fascinado por la historia y el mito de esta ciudad romana. Ahora, de la mano de Rubén Montoya, cuya investigación combina el trabajo en los archivos de Roma con las visitas in situ al yacimiento y a los depósitos arqueológicos donde se custodian los millones de objetos recuperados de las excavaciones, podemos asistir desde primera fila a la historia de esta ciudad legendaria desde su fundación a finales del siglo VII a.C. hasta las recientes excavaciones que se están llevando a cabo. Aprenderemos sobre su historia a través de 100 objetos que retratan cada rincón de esta ciudad, desde los espacios públicos hasta el interior de sus casas;que nos trasladan a las dinámicas económicas y culturales de la zona;que hablan de su organización urbana y de su intensa actividad política;que explican la variedad de los cultos religiosos de la época;que cuentan cómo eran los entretenimientos y los placeres de la vida romana;y que, finalmente, nos muestra la esfera funeraria en esa sociedad antigua. 100 imágenes sobre la vida y la muerte de una ciudad romana única. A través de cada objeto, este libro invita a un viaje de redescubrimiento de una Pompeya escondida a ojos de cualquier turista que pueda pasear entre los miles de edificios vacíos que, aun en ruinas, sobreviven al tiempo.