Una mujer de mediana edad vuelve a su pueblo, en la meseta castellana, acompañada por su hermano, para vender la casa de sus abuelos. La aldea está deshabitada y en la vieja casa afloran los sentimientos y los recuerdos a través de los cuadernos que ella escribía de niña. La década de 1960 fue una época decisiva en su vida cuando, a los doce años, se mudó una temporada al pueblo con sus abuelos maternos. En este período de crecimiento descubrió el mundo rural, sus costumbres y tradiciones, el duro trabajo del campo, así como la belleza de la naturaleza y la importancia de lo esencial. El poderoso vínculo afectivo con su abuela, una mujer sabia y fuerte, el primer amor y una trama rural detectivesca conforman el viaje de la protagonista a sus raíces y a un reencuentro consigo misma. Campos azules, debut literario de Julia Soria, que hoy tiene setenta y tres años, es una hermosa novela de formación, además de un alegato sobre la escritura y la memoria.