Este libro es una paradoja que se afirma negándose ya desde su propio título. El narrador (¿quizá el propio autor ) reflexiona sobre los motivos que le impiden escribir y que al mismo tiempo le obligan a hacerlo, mientras hace un repaso cargado de ironía por su vida y por la literatura occidental. «Esto no es un libro», dice el propio Bénabou. Pero paso a paso recorre los distintos vericuetos de un viaje por el sentido que damos a los libros, los sueños y las historias que pasan desapercibidas hasta acabar convirtiéndose en los cimientos de la vida.