Los Bioy, título que quedó entre los finalistas del XIV Premio Comillas de biografía, autobiografía y memorias, constituye un documento excepcional y peculiar. Todo comenzó en 1949, cuando Jovita Iglesias, recién llegada de Argentina, conoció a Silvina Ocampo. El deslumbramiento fue mutuo: Jovita se sintió impresionada por esa mujer dedicada a la literatura y que vivía con el también escritor Adolfo Bioy Casares, y Silvina supo que esa encantadora jovencita había llegado a su vida para quedarse. Durante casi cincuenta años, Jovita trabajó y vivió con el matrimonio, y fue testigo de los amores, alegrías, desencuentros y tragedias de la familia. Silvia Arias recoge la palabra de Jovita, que cuenta con ternura, humor y sinceridad, y muchas veces melancolía, episodios desconocidos que revelan la faceta más humana de los dos célebres escritores argentinos.