El genial maestro desvela que la verdadera libertad no la ofrecen los dogmas comunitarios (religiones), anclados en creencias, en técnicas, en oraciones, en gurús y disciplinas, que en último término no hacen más que separar, excluir, juzgar... La liberación auténtica es la «libertad interior de la Realidad creadora», el estado del ser pleno, cuando el pensamiento se ha liberado de lo mundano y lo egoico. Una obra maestra.