A finales del siglo XX se confirmaba que el devenir una sociedad estable a otra dúctil y líquida resultaría inevitable. No obstante, fue la pandemia causada por la enfermedad de la COVID-19 la que reveló la fragilidad del modelo anterior y cómo los entornos más sólidos se volvían cambiantes. E modelo tradicional se transformó en un castillo fácilmente expugnable. Este caos se ha vuelto rutinario en la vida cotidiana y ha impregnado el flujo de creación de imágenes en la iconosfera actual: fotografías, videos, memes series y películas. Así el exceso de pantallas y producción constante de imágenes digitales han provocado un nuevo orden visual que paradójicamente hace de la entropía.