Para Henry James, que convirtió su oficio en una especie de religión a la que se consagró en cuerpo y alma y con total exclusividad, la ficción era " una de las bellas artes " y todo acto creativo era mágico. Esa fidelidad irrenunciable a la excelencia artística, esa búsqueda a ultranza del artista absoluto, fue una de las mayores innovaciones que aportó al nacimiento de la narrativa experimental del siglo XX, cuyo advenimiento él ya había intuido veinte o treinta años antes: la concepción del relato o novela como la más excelsa de las formas artísticas. Que " la vida literaria puede ser un tema precioso " lo prueban sus " literary tales " , que tratan preferentemente del conflicto del artista con la sociedad y afrontan los problemas del fracaso artístico desde más de un punto de vista. Para James, el arte debe reflejar la conciencia de un infatigable observador de la vida que sea sensible y a la vez se distancie debidamente. En todos esos relatos lo presenta como un aventurero de la estética y defiende la aventura artística a pesar de sus inseguridades. Su respuesta a la sociedad implica darle la espalda, renunciar a ella, " para encontrar en su arte un ámbito en el que la vida sea esa aventura estética " . Esta edición reúne cinco de esos relatos: " Los papeles de Aspern " , " La lección del maestro " , " La vida privada " , " La humillación de los Northmore " y " La casa natal " .