«El Misántropo» es una creación singular para la época. Los personajes principales de la obra pertenecen a la aristocracia, pero su comportamiento no sirve, como en las tragedias clásicas inspiradas en las monarquías e imperios, para resaltar las virtudes de la nobleza. «El Misántropo» hace funcionar un salón aristocrático en donde se debate el juego de las apariencias o de la hipocresía. Alcestes, el enamorado atrabiliario, es un héroe ambiguo y, como todos los héroes, la invulnerabilidad de sus normas éticas se ve amenazada por el punto vulnerable de sus sentimientos amorosos. Un coro de intrigantes, fatuos, hipócritas, chismosos y vanos cortesanos actúa como contrapunto de Alcestes, y las figuras de Filinto y Elianta constituyen el puente de prudencia y sabiduría, como portavoces del propio Molière.Introducción. Texto y notas de «El Misántropo».