La presente obra ofrece un amplio panorama sobre las consecuencias del golpe militar del 18 de julio. Con los trabajos que contiene se pretende mostrar qué fue en la práctica la destrucción de la República a través de algunos hechos ocurridos en el suroeste a partir de las elecciones de febrero de 1936, prestando especial atención al destino de los alcaldes republicanos, romper mitos asentados sobre la implantación de los golpistas, especialmente en torno al gran foco sevillano de Queipo o a la ocupación de Badajoz, y ofrecer algunas claves sobre los estragos que un golpe militar, una guerra y una larga dictadura han causado en nuestra memoria colectiva y que llegan hasta nuestros días. Cada vez parece más claro que la lucha de memorias que vivimos desde hace unos años solo concluirá a base de historia y de adecuadas políticas de memoria que socialicen esos conocimientos.