Ambiciosa monografía que aborda las relaciones entre las identidades de género y las culturas políticas que se sucedieron en la España del siglo XX. Sus autoras han profundizado en cuestiones vinculadas a prácticas y representaciones simbólicas en torno al género, y analizado aspectos relativos a los cambios sociales y culturales, y a la transformación del espacio político-público. También plantean nuevos interrogantes sobre las respuestas que las españolas ofrecieron, ante la persistencia de tradicionales y preconcebidos roles sexuales así como ante la aparición de nuevos modelos de género presentes en los discursos elaborados por unas culturas políticas de abrumadora hegemonía masculina. Su adaptación, su asunción y su resistencia a la clásica división sexual propició la aparición de mujeres inconformistas con la realidad y la emergencia de nuevas culturas políticas.