Después de dar una definición y describir las formas de atención, los autores analizan en esta obra su influencia - en el niño pequeño y en el escolar- en la percepción, la memoria y el aprendizaje, demostrando su vinculación directa con el rendimiento. Desarrollan después los trastornos o faltas de atención como origen de las dificultades escolares y los medios para evaluarlas. Finalmente proponen aplicaciones y soluciones pedagógicas. Por tanto, este libro resulta de gran interés tanto para estudiantes de Psicología y Ciencias de la Educación, como para las familias y el profesorado.